IL BIBLIOMOTOCARRO

La entrada al blog de hoy queremos dedicarla a que conozcáis la bonita historia de Il Bibliomotocarro de Antonio La Cava.

Antonio La Cava es un maestro jubilado del sur de Italia que decidió que podía hacer aún más por difundir el amor por la lectura entre los más peques. Por ello, en el año 1999, compró una motocicleta APE de segunda mano y la modificó para que pudiera albergar una biblioteca portátil.

Todas las semanas, viaja por los pueblos de la región de Basilicata, anunciando su llegada a través del sonido de un órgano. Al oír su llegada, los niños acuden entusiasmados, puesto que la decoración del carrito remite a una casa de cuento de hadas con su techo y una chimenea, lo que hace que sea recibido con simpatía por los niños. Entonces, les pregunta qué quieren, un libro para escribir o un libro para leer, ya que lleva libros impresos y libros en blanco; esto últimos deben rellenarlos con cuentos e historias sucedidos en los pueblos por los que pasa. Así va recopilando las narraciones folclóricas de la región. Con esto consigue que, poco a poco, los niños se vayan interesando por los libros ya escritos y acaben aficionándose a la lectura.

La ruta seguida por La Cava consta de 8 paradas, en total más de 500 km de viaje, que realiza de forma totalmente gratuita.

En una ocasión, La Cava explicó que durante su experiencia como docente se había dado cuenta de que había una mejor forma de enseñar a los niños el amor por los libros. Sus palabras fueron: «El desinterés por la lectura a menudo comienza en las escuelas donde se enseña la técnica, pero no va acompañado de amor. Leer debería ser un placer, no un deber».

El primer libro que leyó La Cava fue Fontamara de Silone, el cual sacó de un bibliobús en los años 1960, este hecho le marcó y fue lo que lo inspiró para hacer realidad esta iniciativa.

Debido a su gran labor, en el año 2003 el Bibliomotocarro participó en el Salón Internacional del Libro en Turín y en 2005 ganó el Premio Nacional como mejor proyecto para la promoción del libro y de la lectura. Esta fecha fue muy importante para la historia del Bibliomotocarro, porque gracias a este premio fue posible expandir el alcance del proyecto.

Actualmente, el Bibliomotocarro es un modelo pedagógico que trabaja también con varias escuelas. Además, no cuenta con un sistema de registro de préstamos, puesto que, como afirma La Cava, sembramos confianza en los niños y esto genera una relación de responsabilidad.

¿Te ha gustado descubrir esta historia?